Runik proviene del euskera “erruniko”, que significa Rúnico. Algo rúnico es algo relativo a las Runas. Nuestra tierra, muy vinculada a la cultura Castreña (Celtas), ha venido arrastrando desde la Edad de los Metales una fuerte vinculación con esta cultura, llena de símbolos estrechamente relacionados con el cuidado de la naturaleza. Fruto de esa cultura de amor y devoción por la naturaleza, surgieron varios «castros» (asentamientos celtas) a lo largo de las tres edades de los metales, que contribuyeron a la conservación paisajística y natural de nuestra tierra y dejaron su legado e impronta en nuestro carácter, conservando intactos a fecha de hoy, muchos de estos parajes naturales de belleza y valor incalculables. Como el hermoso Valle de Ayala, uno de los parajes naturales más impresionantes del País Vasco, el majestuoso valle que ve nacer las frías y cristalinas aguas del Río Nervión. En pleno corazón de este valle, se encuentra Destilerías Acha, que desde 1831, continúa elaborando sus productos de carácter tradicional, bajo las nobles artes de la destilación, la maduración y la mezcla. Aunque a través de Runik, pretendemos mostrar una parte muy antigua de nuestras tradiciones y costumbres ancestrales, es en una receta de ron, proveniente de la Cuba de finales del siglo XIX, donde Runik encuentra su origen. En aquella época, los rones elaborados en la isla de Cuba, eran rones mucho más corpulentos que los que actualmente se elaboran allí, rones de buen cuerpo y con gran carácter. Muy complejos, muy fragantes y llenos de vida.
Nuestros antepasados, recogieron la sabiduría y el buen hacer de aquellas tierras y trasladaron el noble arte de la elaboración de ron hasta nuestro valle. Entonces, ante la imposibilidad de cultivar grandes extensiones de caña de azúcar en la zona, debido al extendido y fructífero cultivo de los cereales (uno de los principales motores económicos de la zona), comenzaron a importar jugo de caña concentrado, que serviría para la elaboración de gran parte de los destilados para hacer ron. Hace más de un siglo que existió una pequeña plantación local de caña de azúcar. Hace más de un siglo que aquellas técnicas tradicionales para la elaboración artesanal del ron cayeron en el olvido. Hoy, hace menos de veinte años que decidimos recuperar esa tradición y vincularla con nuestro más antiguo pasado. Nace así un nuevo concepto de ron. Runik Copper 8 años, nuestro primer ron de origen tradicional, que aúna las costumbres de todos aquellos pueblos del pasado que cuidaron de nuestra tierra. Un fiel homenaje a siglos de tradiciones milenarias, aún presentes en nuestras vidas. De carácter ligero y amable, transmite con gran honestidad la elegancia de sus aguardientes de caña, su exquisita complejidad y su sorprendente aroma a flores, frutas, raíces y especias. Técnicas antiguas de fermentación, utilizadas en nuestros barriles de roble español para impregnar sus duelas de aroma y sabor, enriquecerán posteriormente nuestros rones de forma natural, ofreciendo una sinfonía de complejos detalles. Vainilla, pieles de naranja, coco y diversas especias, son las notas más características de este novedoso ron, que, trago tras trago, te sumergirá en los parajes naturales de nuestra tierra, trasmitiéndote la esencia y el sabor de nuestros orígenes ancestrales.